“Como diente de león,  semilla que vuela sin rumbo aparente, llevada por el viento, de esta manera era mi sentir, necesitada de un lugar donde caer, de ese espacio vital que me permitiera trasladar mi sed creativa, lienzo añorado por ojos y manos, cual tierra fértil donde germina nuestra naturaleza, pintar era lo que más deseaba hacer, de pronto tuve una gran idea, todo el tiempo estuvo conmigo, que mejor lugar que ese, todos podrían pasar y verlo, mamá, papá y toda la familia, mis grandes motivadores, ya no había tiempo que perder, lo he descubierto tras las sábanas… El colchón de mi cama”.
 
Nací un 30 de julio en la Habana Cuba, prematura, “chiquitica”, quizás eso sirvió para que me llenaran de amor y creciera sintiéndome muy amada, desde muy pequeña me gustaba dibujar, pintar y esculpir, algunas veces como material, la corteza de un árbol llamado jobo.
 
Comencé tallando a los 14 años, con ayuda y motivación de mis padres. A pesar de las dificultades económicas y carencias vividas, papá no dejaba de alentarme y de alguna u otra manera él me acercaba las herramientas necesarias. Incluso a esa edad y con esa alegría hice varios trabajos, algunos vendidos y otros quedándose en casa.
 
Terminando mi secundaria, bachillerato, también pase por una escuela de magisterio la cual quedó inconclusa, empecé a trabajar como rotulista en una empresa de comercio a los 19 años, ahí solicité clases de arte con una maestra rusa NATALIA MATIUR CHIRINA, LIC INSTITUTO SUPERIOR DE ARTE DE LA HABANA, CUBA ,ESCUELA SUPERIOR DE ARTE DE MOSCU, donde mi paso fue muy breve pero ahí vi por primera vez dibujo del cuerpo humano, y alguna técnica de grabado, pude pintar con colores y fue una gran experiencia.
 
Volé alto, dejando atrás mis mejores recuerdos, padres, hermana y seres queridos, mi bella Cuba, trasladándome a Veracruz donde seguiría mi vida. Como casi todos los que amamos esa bella isla y hemos tenido que salir por alguna u otra razón, me costó adaptarme a mi nuevo hogar, sin embargo cual semilla viajera sin rumbo pero inspirada por la pasión en  el arte, llegué al centro cultural Atarazanas de Veracruz donde comencé un taller de escultura en septiembre del año 2000 a junio del 2001 con el maestro David Castillo M.
 
Posterior a esto hubo un buen descanso desde entonces, motivada por la llegada de mis grandes tesoros, mis hijos. Ya en Octubre del año 2012, regresé a la CASA DE LA CULTURA ATARAZANAS a un taller de gráfica, concluyendo en Agosto del siguiente año con la Maestra: Cecilia Burgos Guerrero, donde expuse mis primeros trabajos de grabado. Motivada por continuar preparándome tomé en ese mismo año 2013, el Diplomado Interdisciplinario para la Enseñanza de las Artes en la Educación Básica., organizado por CONACULTA y realizado en las instalaciones del Centro Veracruzano de las Artes “Hugo Argüelles”, bastante enriquecedor, donde conocí excelentes compañeros, formidables seres humanos, ahora amigos, que me han ayudado y alentado para que esa semillita continúe su rumbo, mis sueños.
 
Actualmente he abierto un taller de grabado, donde transmito con alegría mi gran pasión. He dado algunos cursos para niños y adolescentes en algunos colegios, el último en la escuela Cristóbal Colón, también he podido impartir el taller Introducción a la Creatividad en el colegio Alberto L. Merani, y en la biblioteca digital, Telmex promoviendo la cultura digital, con el taller Pintando Emociones.
 
Mientras tanto, día con día persigo en mi pequeño espacio entre colores y pinceles mis anhelos y deseos, intentando transmitir ese eco de mi ausencia, de una Cuba que desborda.